Verificar para mejorar la democracia

El inicio de la veda electoral es una oportunidad para reflexionar sobre el sentido del proceso político que inició formalmente el 20 de septiembre del año pasado. Se trata de un periodo de discernimiento ciudadano que resulta esencial para sopesar la información brindada por las distintas candidaturas al electorado.

Desde el inicio de las precampañas, hacer frente a volúmenes crecientes de información fue uno de los retos centrales para la sociedad mexicana. Esos flujos pretenden persuadirnos de la pertinencia de votar a favor de esta o aquella opción política. Por ello, es esencial distinguir lo verdadero de lo falso al momento de ponderar dichas opciones.

Decía Guillermo O’Donnell que toda democracia consolidada descansa en la existencia de una ciudadanía efectiva. Es decir, en personas capaces de ejercer en libertad su derecho a tomar parte en la vida de una comunidad política. Esta libertad sólo es posible cuando el electorado accede a información veraz. De este modo, la verificación de la información vertida por las personas candidatas es relevante para elevar la calidad de nuestra vida democrática.

De la mano de Animal Político, la Ibero destinó su Centro de Exploración Crítica (CEX), ubicado al sur de la Ciudad de México, para hacer posible esta iniciativa. Gracias a un esfuerzo compartido, verificamos en tiempo real las afirmaciones de las personas que aspiran a la Presidencia de la República en cada uno de los debates presidenciales.

Por lo que toca al primero, la verificación de datos reveló inconsistencias en las propuestas de las personas candidatas. Esto sucedió especialmente cuando hablaron de iniciativas en materia de política pública o de nuevas propuestas en torno a temas clave. Destacar estas inconsistencias resulta imprescindible en un país necesitado de políticas basadas en evidencia.

En el segundo debate el ejercicio de verificación permitió subrayar la importancia de la transparencia en la información económica. Las afirmaciones sobre cifras de empleo, crecimiento y pobreza fueron verificadas rigurosamente por el equipo de Animal Político presente en el CEX. Así, el ejercicio contribuyó a promover un diálogo basado en las realidades económicas del país y no sólo en las declaraciones de las personas candidatas.

Finalmente, en el marco del tercer debate el ejercicio de verificación desmintió afirmaciones erróneas relacionadas con las estadísticas de incidencia criminal y con la estrategia de seguridad. Esto ayudó a clarificar los hechos, especialmente al momento de ponderar la viabilidad de las propuestas presentadas por las personas candidatas en materia de seguridad ciudadana y acceso a la justicia.

Siguiendo la clasificación propuesta por El Sabueso de Animal Político, el ejercicio permitió concluir que las tres personas candidatas emitieron un total de 73 afirmaciones en el marco de los tres debates. De ellas se desprendieron 23 declaraciones engañosas, 14 falsas, 8 discutibles y 4 inexactas. En contraste, el conjunto de las personas candidatas realizó un total de 20 afirmaciones verdaderas.

Incentivar el debate veraz no es el único reto de nuestra maltrecha democracia. Dos realidades igualmente desafiantes son la violencia contra las personas candidatas o el incumplimiento de los marcos legales electorales. En este sentido, el proceso de verificación lanzado por Animal Político en colaboración con la Universidad Iberoamericana no fue menor.

En primer lugar, se trató de una invitación a abrazar la verdad como referente del diálogo con quienes aspiran a ejercer posiciones de responsabilidad política en México. En segundo lugar, fue un llamado a una deliberación ciudadana activa, crítica y responsable para un país necesitado de nuevos horizontes de esperanza.

A días de que las y los mexicanos ejerzamos el sufragio al que tenemos derecho, cumpliendo así también con nuestro deber ciudadano, en la Ibero insistimos en la relevancia de discernir a profundidad nuestro voto teniendo por base la búsqueda de la verdad.

Para los jesuitas, que abrazamos como parte de nuestra identidad la convicción de que la verdad nos hará libres, esta insistencia resulta ineludible. Por eso desde la Universidad Iberoamericana apreciamos la oportunidad de compartir esa convicción con la sociedad mediante la iniciativa de verificación que emprendimos en el marco de los tres debates presidenciales. Después de todo, el llamado del Evangelio es salir al encuentro con las realidades de este mundo para así abrazar la verdad y la libertad que de ella se desprende.

La versión original de este texto se publico en Animal político, el autor otorga derechos de reproducción.

Imagen de portada: heyalexen-Depositphotos.