“No es una utopía”, así cerraba el encuentro de más de mil jóvenes de todas partes del mundo que nos reunimos en Asís para compartir nuestros sueños y proyectos por reanimar la economía y, a través de ella, construir un mundo con posibilidades de presentes y futuros dignos. Cada una/o regresaba con el corazón ardiente para seguir encendiendo la vida cotidiana, en los trabajos gubernamentales, en los proyectos empresariales, en las universidades y en las investigaciones. Pero también el corazón ardiente no dejaba de ser luz y esperanza para los miles de jóvenes que viven en el desempleo o en condiciones de trabajo esclavizantes, deshumanizantes y sin sentido de vida.
El reto al que nos enfrentábamos al regreso era cómo plantar esa semilla recibida en Asís en cada realidad particular de las tierras de nuestro continente, tan bello y tan desigual. Hay que mencionar que una gran parte de las y los asistentes al encuentro internacional de Economía de Francisco (EoF) somos latinoamericanos y caribeños.
En uno de los desayunos en Asís un matrimonio muy joven de polacos me preguntaba a qué se debía esta gran asistencia de América Latina y el Caribe (ALyC). Yo, con mucha seguridad en mi corazón, le respondí que se debe a que en nuestro continente experimentamos de manera más cruda las violencias y las desigualdades provocadas por la economía internacional. Considero que esto hace que las y los jóvenes y adultos jóvenes en ALyC no sólo tengamos ganas, sino urgencia para cambiar el presente de supervivencia por los sueños que nos habitan y el deseo de una vida y un futuro dignos, ya que la juventud es uno de los grupos vulnerables que viven en la delgada línea que se encuentra entre la incertidumbre y la esperanza.
Acogiendo estos desafíos, la Red Latinoamericana de Economía de Francisco (Red Latam), que está formada por más de 300 personas, ha ido adquiriendo cada vez más un fuerte protagonismo y, con un espíritu abierto, laical, crítico, interreligioso, interdisciplinar e intergeneracional ha tratado de abrirse a una organización no–institucional que pueda acoger las múltiples iniciativas de quienes formamos parte de ella. Así, algunas de las comisiones que la conforman están relacionadas con el acompañamiento y la vida de las periferias —corazón de la Economía de Francisco—, la comisión académica, la de comunicación, la ecológica, la de proyectos de emprendimiento y la comisión interreligiosa, entre otras. Cada una ha tomado caminos creativos y libres para su organización y acompañamiento, algunas con más actividades que otras, pero todas igual de importantes y necesarias.
En esta ocasión, hablaremos de los esfuerzos que ha tenido la comisión interreligiosa de la Red para emprender diálogos con las diferentes conferencias episcopales, ya que si bien EoF no está cerrada a ninguna espiritualidad, incluso está abierta a personas que no practican ninguna religión, la gran mayoría de las y los integrantes de la Red profesamos la fe católica, en el sentido amplio de la palabra. Somos jóvenes que creemos en el mensaje del Papa y en su propuesta revolucionaria, de ahí que anhelamos que su invitación sea conocida, difundida y puesta en práctica por quienes nos decimos católicos y toda persona que tenga el deseo de poner al servicio sus dones y talentos para transformar nuestra realidad, pues creemos que la propuesta de EoF puede ofrecer un espacio creativo para la vida de fe, una propuesta concreta para ser Iglesia en salida con incidencia social, para ser hospital de campaña que atienda las múltiples heridas de este mundo violento, pero que también sea incubadora de juventudes que cambien los paradigmas políticos, económicos, sociales y religiosos que han provocado las significativas y dolorosas desigualdades en la sociedad y dentro de la misma Iglesia.
Con esta finalidad nos reunimos el pasado 7 de diciembre en las oficinas de la Conferencia del Episcopado Mexicano, a espaldas de la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, con Monseñor Rogelio Cabrera López, quien preside el colegio episcopal desde 2018. Nos encontramos con un pastor de gran calidad humana y de espíritu abierto, atento a las invitaciones del Papa Francisco y sin miedo a los nuevos retos que tiene la Iglesia en México; bastaría decir que fue un diálogo de mucha escucha sincera que finalizó con las siguientes palabras: “Ustedes no tienen por qué buscar el permiso de ningún obispo”, ya que él mismo reconocía que es el tiempo de las y los laicos, quienes muchas veces nos detenemos por la estructura burocrática y vertical de una de las instituciones más antiguas del mundo, en la que los cambios son a veces lentos, a veces imposibles. Por nuestra parte, terminábamos diciendo lo siguiente: “Ciertamente, no necesitamos su permiso pero sí queremos su bendición, pues queremos construir también de la mano de ustedes y de todas las personas que somos la Iglesia en México”.
Como fruto de esta reunión, Monseñor Rogelio nos invitó a presentar la Economía de Francisco en el xxiii Encuentro Nacional de Vicarios de Pastoral en Casa Lago, sede del Episcopado Mexicano, el pasado 11 de enero. En esta ocasión tuvimos la oportunidad de representar a la comunidad de EoF Mx Adriana Gómez–Chico, economista y profesora, quien colabora en el equipo internacional de The Economy of Francesco y en el Hub de Ciudad de México en el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (Imdosoc); Diego Pérez, contador, emprendedor y teólogo, quien forma parte de la Red Latinoamericana y coordina la Dimensión Interreligiosa, así como el Hub del Estado de México con sede en Nezahualcóyotl, y un servidor, Jesús Becerril, economista, teólogo y profesor; yo formo parte de la Comisión Académica de la Red Latinoamericana de la que han surgido los últimos dos congresos.
Pudimos compartir parte de la historia de EoF, algunos puntos fundamentales de los mensajes del Papa, nuestra experiencia en Asís, la vida de la Red y nuestro caminar comunitario en México, donde hemos apostado por aprender y construir con las periferias de nuestro país, cuyas historias, saberes y alternativas nos han regalado una sensibilidad muy particular sobre lo que queremos construir. Somos una comunidad que, aunque pequeña, recorre el país de norte a sur; 17 personas jóvenes y adultos jóvenes con talentos, tradiciones espirituales, experiencias profesionales y territoriales muy diversas. Somos estudiantes, profesores universitarios, emprendedores, colaboradores gubernamentales y trabajadores de la industria privada que desde la ingeniería, la contaduría, la teología y, por supuesto, la economía estamos tejiendo redes para el acompañamiento de procesos transversales con algunas instituciones, emprendimientos, organizaciones y comunidades.
Sin embargo, creemos que las parroquias pueden sumarse al trabajo que ya se está haciendo. EoF es una oportunidad para que la vida de fe en las comunidades diocesanas supere la división pastoral en la que muchas parroquias se encuentran, donde se piensa que lo litúrgico, lo profético y lo social son actividades distintas que corresponden a grupos, asociaciones o movimientos distintos entre sí. La vida cristiana no está divida, y el carácter bautismal de todas y todos los creyentes nos hace partícipes del único sacerdocio de Jesucristo, quien no vivía a ratos lo profético y en otro momentos lo caritativo. Él, en su persona, era la expresión viva del amor divino que se encargaba de las y los más vulnerables con los que se encontraba. A eso estamos invitados e invitadas, a que los templos dejen de ser solamente espacios de culto o de formación catequética, y que sean centros operativos de la caridad, lugares de encuentro donde el Espíritu Santo mueva y suscite en los corazones proyectos concretos, de acuerdo con cada realidad particular, donde la Fracción del Pan trascienda las paredes y los atrios para alimentar a las y los más necesitados de la sociedad.
La propuesta fue bien acogida por los vicarios de pastoral; algunos de ellos se acercaron para contarnos proyectos semejantes que están llevando a cabo en algunas diócesis. Nuestro corazón nuevamente salió contento e ilusionado por construir redes de comunión con las diócesis de nuestra Iglesia en México.
Si te interesa conocer un poco más de Economía de Francisco te invitamos a conocer la página oficial y te dejamos nuestros medios de contacto. ¡Esperamos que seas parte de este cambio!
Red global: Economía de Francisco
Facebook: Economía de Francisco en México
Correo de contacto: economiadefranciscomx@gmail.com
Un comentario
Me interesa estar informado al respecto y desde la trinchera popular aplicar ese proyecto de la economía de Asís.