En este número de CHRISTUS buscamos reavivar nuestro compromiso con la preservación ambiental y reflexionar profundamente sobre el papel de la Iglesia universal y sus comunidades.
Sabemos que es una temática que desafía nuestra esperanza, por lo que proponemos poner en la mesa perspectivas que nos permitan construir un crisol de oportunidades. Esto abarca desde las luchas ambientales y territoriales hasta la poética detrás de la ecoespiritualidad.
Arrancamos la lectura con un cuaderno a cargo del politólogo y activista ambiental Pablo Montaño Beckmann, director de la organización no gubernamental Conexiones Climáticas, quien lanza una aguda crítica al antropoceno y hace un alto para pensar el colapso climático y ambiental en primera persona.
El segundo cuaderno, a cargo de Mauricio López Oropeza, director del Centro de Programas y Redes de Acción Pastoral del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (CELAM), profundiza sobre la nueva edición de la exhortación apostólica Laudate Deum, una versión actualizada de la emblemática Laudato si’, revisitada por el propio papa Francisco en octubre de 2023. En esta revisión el papa enfatiza los desafíos ambientales y espirituales aún pendientes en la materia.
La reflexión nos lleva a recuperar las luchas de las mujeres en las causas ambientales. Cristina Auerbach Benavides nos guía hasta Coahuila, donde dirige desde hace 17 años la organización Familia Pasta de Conchos. La líder comunitaria recupera de primera mano el andar de miles de mujeres que resisten a la explotación de sus tierras y que cuidan de sus familiares, enfermos, accidentados y descartados por sus empleadores: las mineras.
Abordar la cuestión ambiental desde una perspectiva de fe implica releer la situación desde la ecoteología, la ecoespiritualidad y la ciencia, considerando su complejidad. Desde España, Victorino Pérez Prieto, doctor en teología y filosofía, ofrece una perspicaz disertación para contemplar la realidad de una manera renovada.
Por último, el filósofo y teólogo Pedro Pablo Achondo Moya nos invita a examinar la emergencia climática desde la poesía y la espiritualidad. Para el autor, los tiempos actuales exigen de nosotros una apertura creativa que nos permita buscar «mundos habitables, dignos, justos y con futuro», persistiendo en la lucha «por construir un mundo más justo, sostenible en sus procesos y amigable con el medio ambiente».
Esperamos que este número inspire la reflexión, renueve nuestra esperanza y nos aliente a seguir haciendo todo lo posible para cuidar de nuestra Casa Común como creaturas del Reino y de la Creación de la que somos parte. Todavía nos queda mucho por hacer como comunidad cristiana.
«En los cuerpos de las mujeres se dibuja el extractivismo y los megaproyectos en su expresión más brutal, es una ‘zona de sacrificio’, como ahora definimos a la región carbonífera de Coahuila al norte de México, con sus más de tres mil muertos en minas de carbón». Cristina Auerbach Benavides
Un comentario
Así es, es necesario unir esfuerzos. No somos machas pero somos muchas. Este es un reto mundisl