«¡Feliz Navidad! Cada vez que una mujer llega a esta casa, Dios vuelve a nacer».
Aquellas palabras —recuerda la autora María José Encina Muñoz— fueron un umbral en su juventud, cuando la búsqueda de su vocación comenzaba a abrirse paso en su corazón. La frase anticipa lo que el lector encontrará en las páginas de su nuevo libro: la certeza de que la vida insiste, renueva, promete. Que «Dios vuelve a nacer» aun en medio del sufrimiento.
Esta es la tercera publicación de Encina Muñoz con Buena Prensa. Su primer libro estuvo dedicado a las mujeres bíblicas que acompañaron la pasión de Jesús; después vinieron los relatos de aquellas que, atendiendo al llamado del Resucitado, y que se convirtieron en las primeras portadoras del «ve y diles».
En ese camino aparece ahora Adviento a la espera de Dios, nueva entrega en la que la autora propone una relectura narrativa de los textos bíblicos, iluminada por una serie de itinerarios de oración que invitan a la introspección como camino al encuentro con Dios.

Foto: Buena Prensa
Las preguntas —tan presentes en el libro— son un salto al interior: «aparecen como una forma de poner la vida ante los acontecimientos, para descubrir la presencia de Dios en medio de ellos». Los ejercicios —dice la autora–– pueden realizarse de manera personal o comunitaria.
Como lo dice su título, el tema central del libro es el adviento, entendido como un tiempo de espera que anticipa la vida plena; un tiempo propicio para la esperanza y para acoger con gratitud y confianza los encargos de Dios. Como lo hacen las mujeres que esperan nueve meses la llegada de un hijo; como María, que dijo libremente «sí» al ángel Gabriel; como Isabel, que reconoce bendición en el amor que crece en su vientre añoso.
A lo largo de cinco capítulos Encina Muñoz desentraña las dudas, las certezas y las emociones de mujeres bíblicas como María, Isabel y Ana, mostrando cómo la fuerza del amor de Dios «lo moviliza todo, transformando y recreando» sus historias.
En el capítulo «María, la mujer de la promesa» la autora nos conduce a la confianza con la que María se abre a la misión de ser Madre del Hijo de Dios:
«Yo amaba a José… ¿cómo le explicaría todo esto? ¿Cómo él lo comprendería?»
Esa tensión, entre vocación y contexto, entre deseo y realidad, atraviesa también nuestras vidas. Nuestros afectos que, a veces, se ven interpelados por el miedo, la duda o la incertidumbre pero también de certeza, de fe en que Dios nos acompaña.
Porque, como escribe la autora:
«Ante nuestra vida se abren nuevos horizontes, donde lo cotidiano nos revela la presencia de Dios. La vida se gesta desde su condición sagrada y aviva en nosotras un deseo inagotable por descubrir aquello que antes permanecía oculto».
Y subraya un aspecto esencial:
«María es invitada libremente. ¡Qué importante y sagrado es nuestro consentimiento! Nada es impuesto».
Al cerrar la lectura, algunas preguntas quedan suspendidas en el aire:
¿A qué estamos llamadas y llamados en este tiempo en que revivimos con esperanza la llegada del Hijo de Dios? ¿Qué consentimos desde el corazón en estos días? ¿Y qué regalo queremos ofrecerle al Niño Jesús en este tiempo de espera?
Adviento a la espera de Dios está disponible en venta en el sitio de Buena Prensa.






