«Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad»
ENERO
Domingo 14
- 1 Sam 3, 3–10
- 19; Sal 39
- 1 Cor 6, 13–15. 17–20
- Jn 1, 35–42
§ Tanto el relato del libro de Samuel como el de san Juan abordan el tema de la vocación. Samuel es llamado tres veces por Dios, hasta que es ayudado por Elí para descubrir que la voz que lo llama es la del Señor. Los discípulos de Juan son sorprendidos por el título que éste le da a Jesús, pues para el bautista Jesús es el Cordero de Dios. En ambos relatos el sentido de la escucha es primordial para atender el llamado de Dios; son los maestros quienes revelan las pistas para que sus discípulos puedan abrirse a la experiencia de encuentro.
§ Para los discípulos son las palabras de Juan las que mueven la curiosidad de estos hombres, como si aquellos maestros los prepararan al encuentro con el Misterio. Tanto Elí como Juan nos recuerdan que el buen maestro es aquél que no da las respuestas, sino el que alimenta las búsquedas para que la creatura se encuentre con su Creador.
Como seguidores de Jesús estamos llamados a «escuchar la llamada de Dios» desde el testimonio de aquéllos que lo han reconocido, para que demos una respuesta decidida y manifestemos que hemos encontrado al Mesías en nuestra vida.